Oración a la Santa Muerte para hacer daño

Oh!… Fortaleza de los vivos, que estamos en la Tierra para alabarte, Niña Santa Muerte, Loada por tus dones… Hazme la Gracia de vengar mi nombre… y de resarcir mi daño!

Tú, Sagrada en Infinito Cielo, puedes darme tu Alabanza para devolver el mal que me ha causado (di el nombre del inculpado)… Oh, Santísima y Noble eres, dentro de mi desesperanza!

Oye mi súplica desde tu divino Altar!… Sólo tú puedes encarrilar al hombre que dañó mi alma, tú eres quien a mí, podrá vengar! Niña Negra, del Manto piadoso y sagrado, no me dejes sola con este injusto daño!

Te rezo esta vez, para acariciar tu Clemencia… y pedirte con llanto en mis ojos, tengas consideración por mi vida, que se encuentra vacía y sin saber qué hacer, con este gran dolor!

Niña mía, de la Muerte redentora, yo, tu sierva fiel, te imploro esta tarde, castigues al hombre que un mal me causó!… Déjame decirte que nada es posible, sin tu dadivosa y justiciera ayuda, Oh, Santa y Virtuosa, oye mi clamor!

Hoy, quiero vengarme de quien me ha lanzado su odio sin pena, quien me ha lastimado con toda su fuerza, hasta quebrantarme la paz de mi alma… Él es un malvado, que merece mi ira y un gran escarmiento… oh, Señora Santa!

Prometo brindarte mi ofrenda si cumples! Mi agradecimiento será sin igual! Te prometo Niña, (hazle tu promesa). Yo he de servirte con mis oraciones y vivir rendida a tu Pedestal!

Gloriosa Santa Muerte, dame tu palabra que habrás de vengarme, devuélvele el mal! Acaba con su suerte, que reciba en vida toda tu venganza y que soportar, no pueda, mi Niña… una cosa más!

Oh, Misteriosa Muerte, Señora de la Calavera Sagrada!… Espléndida en la oscuridad, reluciente en su silencio y Justa en su morada!

Te vengo a suplicar me des una gran mano para hacer la vendetta , a quien tanto me ha dañado! Él, (nombra a quien te lastimó), no merece mi piedad, por ser un cretino, sucio y desalmado!

Hoy, arrodillada a tus plantas, te invoco, Muerte Loada y Santa, para que le des alivio a mi gran desesperanza! Tú puedes destruir con tu guadaña, oh, Protectora y Justiciera! Te ruego, me concedas esta sana petición!

Encárgate, oh, Niña de oscurecer su camino, arrojando grandes piedras, dentro del propio destino… Que pague por su maldad!… Quiero venganza, mas, nunca piedad!

Es un ser tan despreciable que sin reparo ni causa, me destrozó, Niña Santa… Patrona de mi verdad! Una ofrenda te prometo si me has de conceder, este pedido que avala mi deseo de venganza!… Por favor, compréndeme!

Mi regalo, Niña Santa será (di tu ofrenda), y te prometo en la vida seguir yo siendo tu sierva, cada vez con más fervor! He de rezar a tus plantas, con más delirio y clamor, tú eres en mi destino, el gran designio de Dios!

No permitas que ese hombre siga dañando mi alma, él ya no es digno de nada, porque es un ser sin destino!… Tú eres quien con su poder podría, darle su sabio castigo… Oh, mi Santa, Pura y Buena!… Contempla hoy mi pedido!

Yo sé que todo este llanto, me habrás de secar, Mujer! Sé que me habrás de entender, por qué yo quiero vengarme! Él ha herido mi carne… mi alma y mi dignidad! Te pido tengas Piedad, Santísima Muerte Madre!

Comienza mi fe de nuevo a sentir que renacer, después de tantas injurias… es cual volver a nacer! Dame tu mano, Señora…

Dedícame tu don divino y vuelve a mí el gran destino… que merezco, te lo pido! Brinda su merecido a quien debes castigar, y a mí bendíceme ahora, desde tu Glorioso Altar!!